Despertar el interés de los estudiantes por la sismología y por las Ciencias de la Tierra. Este es uno de los principales objetivos del proyecto SANIMS que impulsa un equipo de investigadores del Instituto de Ciencias de la Tierra Jaume Almera del CSIC (ICTJA-CSIC). Y para ello han instalado 12 estaciones sísmicas en diferentes centros educativos de Barcelona y L'Hospitalet de Llobregat configurando lo que los responsables del proyecto llaman una "red sísmica educativa".
Las estaciones se instalaron entre noviembre y diciembre de 2019 en los 12 centros educativos de secundaría colaboradores, que han cedido un pequeño espacio para instalar unos sismómetros del tipo Raspberry Shake, equipados con un sensor de eje vertical i que transmiten la señal registrada a una base de datos externa, desde donde es posible acceder a los datos en tiempo casi real.
"La red que hemos desplegado tiene una buena escala de resolución, ya que cubre una superficie de unos 10 km2 de la ciudad. Además, la geometría que hemos diseñado nos permite cubrir las principales unidades geológicas del área de Barcelona", explica Jordi Díaz, investigador del ICTJA-CSIC y coordinador del proyecto SANIMS.
Como contraprestación por la cesión del espacio para instalar las estaciones, los responsables del proyecto realizan diferentes charlas divulgativas dirigidas a los estudiantes de los centros colaboradores.
"La idea es utilizar la fascinación que genera el hecho de que un terremoto que sucede al otro lado del mundo pueda ser registrado por un aparato instalado en su escuela para acercar las Ciencias de la Tierra a los estudiantes y motivarles para que continúen aprendiendo a partir de las diferentes herramientas disponibles en la web", explica Jordi Díaz.
Las charlas son de carácter introductorio y se centran en cómo se registran las ondas sísmicas y en mostrar el tipo de información que se puede extraer de estos registros. Durante la sesión se analizan las señales registradas por el aparato instalado en el centro a lo largo de los últimos meses.
"Los estudiantes pueden ver cómo ha oscilado su edificio al llegar las ondas sísmicas generadas por los recientes terremotos ocurridos en Albania, Puerto Rico o el sur de Cuba o por otros terremotos de menor magnitud ocurridos en la zona del Pirineo. Analizando las señales, los estudiantes pueden observar también las variaciones que se producen en el ruido de fondo de la señal entre los días laborables y los festivos y ver en los registros sísmicos los picos de amplitud registrados durante los cambios de aula ", indica Jordi Díaz.
"La presencia de las Ciencias de la Tierra en el currículo de la educación secundaria ha ido disminuyendo en los últimos años y creemos que es urgente llevar a cabo acciones para atraer a los estudiantes hacia este ámbito del conocimiento", comenta el investigador del ICTJA-CSIC.
Más allá de los objetivos relacionados con la divulgación, la red desplegada tiene también un objetivo científico. Los responsables del proyecto quieren ver "si es posible obtener una imagen tomográfica del subsuelo de la ciudad a partir de los datos registrados por los sismómetros que configuran esta red urbana".
Redes sísmicas educativas similares se han desplegado también en otros países en los últimos 10 años, como por ejemplo en Estados Unidos, Gran Bretaña o Australia. Según los impulsores de SANIMS, estas iniciativas "se han mostrado útiles para acercar a los estudiantes a las Ciencias de la Tierra".
En el proyecto SANIMS trabajan también Martin Schimmel, Mario Ruiz y Ramon Carbonell, todos ellos investigadores del ICTJA-CSIC.
Artículo de referencia
Diaz, J., Schimmel, M., Ruiz, M., & Carbonell, R. (2020). Seismometers Within Cities: A Tool to Connect Earth Sciences and Society. Frontiers in Earth Science. Retrieved from https://www.frontiersin.org/article/10.3389/feart.2020.00009